Los magistrados son vitales para el correcto funcionamiento de nuestro sistema electoral.
La Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) ve con preocupación las numerosas vacantes que persisten en la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), así como en las Salas Regionales y Locales.
Estas ausencias son más que meras omisiones administrativas; representan un riesgo real para la integridad de nuestro sistema democrático.
Las funciones desempeñadas por los magistrados son vitales para el correcto funcionamiento de nuestro sistema electoral. Su labor consiste en garantizar que los procedimientos electorales se ajusten a los parámetros constitucionales y legales, lo cual es esencial para fortalecer la estabilidad y legitimidad de nuestro sistema democrático.
La falta de magistrados no solo representa una violación de los derechos político-electorales de los ciudadanos, sino que también pone en peligro la integridad misma de nuestro proceso democrático.
Actualmente, se encuentran pendientes de nombramiento un total de 44 cargos en el TEPJF. Entre estos, destacan dos magistraturas de la Sala Superior, seis magistraturas regionales federales y 36 vacantes de magistraturas electorales.
Esta situación no solo dificulta el funcionamiento óptimo de dichos órganos, sino que también compromete su capacidad para enfrentar las próximas revisiones constitucionales que se llevarán a cabo.
El Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación es la autoridad especializada a nivel local y federal para impartir justicia electoral y proteger los derechos de la ciudadanía. Su importancia radica en su capacidad para garantizar la legalidad, imparcialidad y equidad de los procesos electorales en el país, tal como lo establece el artículo 94 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.
Según lo dispuesto en el artículo 99 de la Constitución, la Sala Superior del TEPJF debe estar integrada por siete magistrados y un presidente, quienes son designados por el Senado de la República. Es esta misma Sala Superior la encargada de declarar la validez de la elección presidencial, lo cual resalta aún más la importancia de contar con una integración completa y funcional.
En el actual contexto político y social de México, resulta imperativo que la Sala Superior del TEPJF opere con su composición total. La procrastinación por parte de los legisladores en la designación de los magistrados podría tener consecuencias nefastas para nuestro sistema democrático, incluida la erosión de la transparencia del proceso electoral y la afectación de la integridad de las elecciones.
Desde la Coparmex hicieron un llamado urgente al Senado de la República para que dejen de postergar sus obligaciones y cumplan con su responsabilidad constitucional de designar a los integrantes del TEPJF.
Exigimos que se respeten los derechos político-electorales de los ciudadanos y que se cumplan las normas constitucionales que han sido fundamentales para fortalecer nuestro sistema democrático a lo largo de los años. El pluralismo político y la participación cívica están en juego, tanto a nivel local como federal.
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