Desde marzo iniciaron con los trabajos protocolarios, como se hace cada año, con el fin de garantizar la seguridad de las personas.
Existen en Los Cabos 44 albergues temporales para utilizarse si la amenaza de un huracán así lo exige, de acuerdo a la activación de un plan A o un plan B.
Jesús Hazael López Armentilla jefe del departamento de Monitoreo y Alertamiento de la Dirección de Protección Civil en Los Cabos, informó que desde marzo iniciaron con los trabajos protocolarios, como se hace cada año, con el fin de garantizar la seguridad de las personas que no encuentran en zonas de riesgo o alto riesgo y son vulnerables a los efectos de un ciclón tropical.
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Indicó que los albergues distribuidos en la geografía del municipio se encuentran evaluados, de los cuales 14 están en Cabo San Lucas 7 en el plan A y 7 en el plan B. Para San José del Cabo se cuenta con 18 refugios 7 de plan A y 11 del plan B. En Miraflores se cuenta con 1 en el plan A la secundaria Alfredo Green y 2 en el plan B las escuelas Estado de Sinaloa y Estado de Tabasco.
En Santiago, se abre la escuela Constituyente de Querétaro y si hay necesidad también el jardín de niños Justo Sierra. En el plan B, en Matancitas la escuela Antonio Mijares; en el Campamento en Buena Vista, la primaria 15 de Mayo.
En La Ribera son 5 refugios, 2 en el plan A y 3 en el plan B., la telesecundaria Agustín Olachea, Telebachillerato número 12 y la primaria Francisco Cota Moreno, antes tenía la casa Ejidal, pero tiene problemas que se deben de subsanar.
En cuanto al impacto de un huracán categoría 5, López Armentilla dijo que los protocolos ya se encuentran establecidos, se realiza la capacitación a todos los funcionarios públicos y de otros organismos que forman el Consejo Municipal de Protección Civil para que tengan conocimiento de la operación de los sistemas, desde la etapa temprana para ciclones tropicales, en cuál será la actuación de cada uno.
Explicó que hace falta trabajar en cuestión de la cultura de la prevención civil en la ciudadanía, para que colabore con la autoridad y poder enfrentar estos fenómenos que no se pueden frenar.
“Son un capricho de la naturaleza, pero sí se puede disminuir las consecuencias”.
Indicó que, si bien el municipio está creciendo por la gente que llegue a trabajar, les gusta y se quedan, deben averiguar sobre la misma geografía, cómo se comporta el ambiente ante la presencia de esos fenómenos hidrometeorológicos y no terminar habitando en una zona de riesgo o alto riesgo.
"Nosotros hacemos lo propio llevando pláticas a quienes lo soliciten, pero no se cuenta con suficiente personal por ello, no se puede ir casa por casa, pero pueden informarse en la página de Protección Civil sobre las acciones y monitoreo de fenómenos", finalizó.
Verónica González | El Sudcaliforniano
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