Viene poca producción, pero con las lluvias el cultivo es de mayor calidad.
Producción de nuez podría aumentar 18.6 por ciento en el presente ciclo agrícola en el distrito Río Florido, ya que proyectan generar dicho fruto seco en casi 14 mil 600 hectáreas, respecto a las 12 mil 306 que se cosecharon el año pasado, según informó Roberto Baca, titular de la Sader.
Baca detalló que las pasadas lluvias favorecieron a los más de 700 nogaleros que esperan que durante los próximos meses se presenten más lluvias y con ello la humedad permita mayor calidad en este producto.
Por lo anterior, Roberto Baca Perea, jefe de la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural en el distrito Río Florido, comentó que a pesar de que este año las lluvias no han sido las que se esperaban, respecto al año pasado la acumulación del líquido pluvial ha sido mayor.
Mencionó que durante las últimas semanas de julio se presentaron lluvias, mismas que dieron mayor esperanza a los productores, de poder alcanzar la producción que se espera para este año.
“Viene poca producción, pero con las lluvias el cultivo es de mayor calidad, lo cual podría favorecer a que el precio de este fruto sea mejor para los productores y superar la cantidad en que se cotizó el año pasado”, dijo.
Resaltó que en este año las expectativas de los más de 700 nogaleros que hay en el distrito Río Florido, que comprende Jiménez López y Coronado son positivas ante las lluvias presentadas en dichos municipios, que aunque no han sido las suficientes, esperan que los pronósticos sean favorables durante los próximos meses.
Manifestó que para este año se espera la producción de 14 mil 600 hectáreas en el distrito, cifra que representa un 18.6 por ciento más a las que se cosecharon el año pasado que fue de 12 mil 306 hectáreas.
“Ésta es sólo una proyección que tenemos, la expectativa es buena; sin embargo, necesitamos que culmine el periodo de lluvias para concretar la cifra que se podría producir en este ciclo agrícola”, destacó.
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Enfatizó que durante las últimas semanas de julio en uno de los ranchos nogaleros se acumularon hasta 75 milímetros, una cifra que permitió de alguna manera mitigar un poco los estragos de la sequía; sin embargo, aún se requiere mayor cantidad de lluvias.
“Aún se están presentando altas temperaturas y la humedad en el suelo no ha sido la más positiva, pero las lluvias nos dan una expectativa más positiva de lo que se tenía antes de que se presentaran las precipitaciones”, manifestó.
Baca Perea detalló que, en el caso de los nogales, las lluvias ayudaron a controlar el pulgón, un tipo de plaga que se logró reducir, pero es necesario esperar el momento en que asciendan las temperaturas para conocer cómo es el comportamiento.
Alejandra Pérez | El Sol de Parral
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