Ella es trasladada en el brazo de Alex, quien de manera pacífica disfruta de los rayos del sol de este destino de playa.
No solo perros, gatos, pericos vienen a disfrutar de las paradisiacas playas de Acapulco, sino también “Godzilla”, y no es el dinosaurio mutante sino una colorida iguana.
Este reptil fue un regalo de graduación para el joven Alejandro de 19 años, por parte de su esposa por haber culminado sus estudios de preparatoria.
Godzilla llegó a sus vidas cuando tenía dos meses de vida, hoy tiene ya un año y es muy consentida por sus amos ya que a dónde quiera que vayan la llevan consigo para no dejarla sola en su hogar.
Los turistas procedentes del poblado de Chalma, del Estado de México la alimentan con jitomate, lechuga, manzana, y a veces con sandía y melón.
Ella es trasladada en el brazo de Alex, quien de manera pacífica disfruta de los rayos del sol de este destino de playa.
“Todo el tiempo está en el sol pero no la dejo mucho tiempo porque se ponen negras, por eso se les debe tratar su piel con diferentes cosas, yo quiero que siga así verde porque se ve más bonita y llama la atención”.
La encantadora iguana es muy amigable porque se deja tocar y además Alejandro y esposa le han enseñado a saludar con el brazo, “saluda mi amor”, le dijo a su reptil quien estiró sus brazos robustos y poderosos con dedos provistos de uñas muy fuertes y abrió más sus ojos con sus pupilas verticalmente elípticas.
Godzilla había sido considerada liberarla, sin embargo, por las condiciones de la Ciudad no se han atrevido y permanecerá por muchos meses más con ellos.
“La pensábamos liberar, pero como es ciudad, por los carros no vaya a ser que la vayan a atropellar y eso nos preocupa mejor nosotros la seguimos cuidando”.
La familia estará hasta el fin de semana disfrutando de las vacaciones de verano en las playas de Acapulco.
Heidi Nieves | El Sol de Acapulco
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